martes, 3 de abril de 2012

Barça, Athletic, Milan y Pepe

El Barcelona-Athletic del pasado sábado fue objeto de controversia por circunstancias ajenas a lo visto en el terreno de juego (2-0 favorable a los azulgrana). El horario del duelo, fijado para las 22.00 del 31 de marzo, suponía un auténtico quebradero de cabeza para los de Bilbao, que en la tarde-noche del jueves 29 habían disputado en la ciudad alemana de Gelsenkirchen un complicado partido de la Europa League frente al Schalke 04 (el Athletic ganó 2-4) y dispusieron de menos de 48 horas para descansar antes de vérselas con el Barça en Liga.

Con el fin de que sus jugadores pudiesen recuperarse del desgaste, la directiva del equipo vasco había solicitado a la del catalán posponer unas horas el choque, concretamente a las 12.00 del domingo 1 de abril. El Barça rehusó aceptar. Tenía una razón de peso para ello, pero algunos medios de comunicación prefirieron ignorarla y recalcar otras circunstancias. 

En su blog en la web de 'El Mundo', Jon Rivas habla del carácter catalán del Barcelona -"si no hay ganancia, pérdida segura", escribe el periodista- y denuncia que "nunca se ha visto un gesto de consideración del Barcelona para con el Athletic y seguramente, para con nadie". No se pregunta, sin embargo, si el apretado calendario del Barça permitía ese gesto de consideración.

Otro medio que subraya las distintas condiciones en las que azulgranas y 'leones' jugaron el partido del sábado es 'El Confidencial', que presta mucha atención al derroche físico de los bilbaínos el jueves -atención merecida, dicho sea de paso, porque la gran actuación del Athletic en la competición heredera de la UEFA es digna de elogio- pero, como sucede con Jon Rivas, no hace caso al motivo que propició la negativa del Barça a jugar el partido en el mediodía del domingo 1: tener que jugar el martes 3 su duelo de vuelta en Liga de Campeones contra el Milan

'Los culés, de compras por Milán mientras los 'leones' llegan 'fundidos'", tituló este diario digital, haciendo hincapié en la tarde libre que los futbolistas del Barça disfrutaron en la capital de Lombardía el jueves tras haber jugado el miércoles la ida de cuartos de final frente a los 'rossoneri' (0-0). Del partido de vuelta en el Camp Nou, mejor no hablar. 

Nadie va a negar que el Athletic se enfrentó al Barcelona en desigualdad de condiciones. Es injusto que un equipo no disponga siquiera de 48 horas para descansar entre partido y partido. Pero ¿sería justo que el Barça jugara el domingo por la mañana teniendo que enfrentarse al Milan hoy martes cuando el propio Milan jugó su partido de liga el sábado?

En el Barça-Athletic, ninguna solución sería equilibrada. Si se atendían las peticiones de uno, quedaría perjudicado el otro. Pero los medios han señalado al Barça como culpable. Yo creo que, puestos a buscar responsables, habría que apuntar a la UEFA. El Milan-Barça se jugó un miércoles, lo mismo que el Marsella-Bayern. El Apoel-Madrid y el Benfica-Chelsea, el martes. ¿Por qué los que jugaron la ida un miércoles tienen que disputar la vuelta el martes de la semana siguiente, mientras los que jugaron la ida un martes dirimirán su eliminatoria el miércoles de la semana posterior? ¿No sería más lógico que los que jugaron en miércoles vuelvan a hacerlo al miércoles siguiente y que los que lo hicieron en martes se vuelvan a encontrar el martes siguiente? 

Las fechas elegidas por la UEFA son difíciles de entender, como la sandez de repartir los partidos de octavos de final de Liga de Campeones en un mes -en esta edición, los primeros de ida se disputaron el 14 de febrero, y los últimos de vuelta, el 14 de marzo-. Hasta 2009, todos los equipos clasificados para octavos disputaban los partidos la misma semana: partido de ida, semana de descanso y partido de vuelta. Era lo razonable. Ahora, se necesitan cinco semanas para algo que puede solucionarse en tres. 

Nunca sabremos si el Barça hubiera aceptado jugar el domingo con el Athletic de tener que medirse al Milan mañana en lugar de hoy. Pero al menos habrá que concederle el beneficio de la duda.

Decía en el primer párrafo que el Barça-Athletic fue objeto de controversia por circunstancias ajenas a lo visto en el terreno de juego. Hay una excepción: el penalti señalado sobre el barcelonista Tello fue más que riguroso y, en mi opinión, no hubiera pasado nada si el árbitro no lo hubiese pitado. No obstante, también es cierto que en el Milan-Barça hubo dos penaltis en el área local que el colegiado no señaló: el derribo de Abbiati a Alexis y el agarrón de Mesbah a Puyol


 

¿Cuál fue la reacción del propio Puyol, capitán azulgrana, sobre esas jugadas polémicas? Afirmar que "no hay que buscar excusas". ¿Qué hubiera ocurrido de ser el Madrid de Mourinho y Pepe el equipo afectado por dos jugadas como ésas? Visto el ataque de nervios madridista tras su empate en Villarreal, no cuesta imaginarlo

No hay comentarios:

Publicar un comentario